sábado, 28 de noviembre de 2015

Habia una vez un barman

Este cuento mas o menos es el que les cuento a mis hijos para dormirse desde que eran muy pequeños. No soy Grimm soy cantinero sepan disculpar. Pero me pareció linda manera de meter mi profesión en su mundo infantil, amigos míos este debe ser el mas personal de todos los post que puse jamás en este Blog.


Había una vez hace mucho mucho tiempo, en un país que se llama los Estados Unidos, en el estado de California una Ciudad llamada San Francisco (y esa ciudad aún continua allí).
Por aquellos tiempos paso algo llamado la fiebre del oro, se encontró oro en los ríos y gente de todas partes fue a California a ver si tenia suerte y se hacia millonario buscando oro.
No todos tenían suerte esta es la historia de uno de ellos que no tuvo suerte con el oro, y decidió entonces probar suerte abriendo un hermoso bar.

El bar tenia una barra de madera de caoba lustrada, era una  barra larguísima, detrás de la barra habia muchos estantes llenos de botellas de todas partes del mundo, San francisco es un puerto, así que allí llegaban todos los días barcos trayendo mercancías de Asia y Sudamérica y todas partes del mundo.

En el bar había un piano y un pianista, unas chicas que solían bailar y cantar todas las noches.
Y detrás de la barra estaba el barman. Era el muchacho que no tubo suerte buscando oro, pero se volvió famoso preparando tragos. 
Este muchacho tenia una gran sonrisa un gran bigote y también grande era su panza, porque amaba beber y comer sabroso.
Siempre se vestía con chaleco y moño (pajarita), era un tipo muy elegante. y se peinaba con gomina para el lado derecho el flequillo y para abajo el bigote.
Su nombre era Jeremías su apellido Thomas, pero los amigos y clientes lo llamaban Jerry, como el ratón de los dibujitos animados. (tom & jerry).

Jerry Thomas llegó a ser el mejor y mas famoso cantinero del mundo, el barmán mas simpático de la historia, saludaba siempre amablemente a todas las personas que entraban y salían de su bar.
-Buenas Tardes señor, buenas tardes señora bienvenidos al bar, gracias por venir chicos hasta luego,  nos vemos la próxima muchas gracias -
Preparaba con mucha habilidad y maña cócteles de todos los colores y sabores.
Tenia unas hermosas cocteleras y cucharas de plata, cortaba el hielo con formas divertidas, cuadrados círculos estrellas triángulos, y todos sus vasos y copas eran de cristal.
Jerry Thomas preparaba tragos y cócteles fríos en verano y calientes en el invierno y tenia una historia o un chiste para contar con cada trago.

Ahí siempre mis hijos preguntan cosas como :
¿Hacia tragos sabor Frutilla? 
¿Hacia tragos con sabor a pastillas de anis? 
Color verde? color rosa? ¿color de la camiseta de mi equipo de fútbol también?

Y yo siempre respondo, Si chicos hacia tragos de todos los sabores y colores que te puedas imaginar.
Y además cada vez que alguien bebía un cóctel preparado por Jerry Thomas se ponía muy muy feliz.

Jerry Thomas preparaba cócteles con tanto amor que le traían a quien los bebiese recuerdos felices, cada cóctel era un poco como una poción mágica. 
Jerry se movía detrás de la barra como bailando, era un gran espectáculo verlo trabajar, y por eso su bar estaba lleno todas las noches.

Una noche de esas noches mientras todos eran felices y reían, se abrió la puerta del bar y entraron 3 señores vestidos de negro. Sombrero negro, botas negras, camisa y pantalón negro y un pañuelo negro tapándoles la cara, eran ... villanos, y obviamente tenia escopetas negras y dijeron al unisono.
-¡Arriba las manos esto es un asalto!-, seguramente habían escuchado de la fama del bar y decidieron ir a robarlo.
El pianista dejo de tocar, las señoritas dejaron de cantar y bailar y todas las personas se quedaron calladas, asustadísimas.
Los villanos les quitaron los relojes, los pañuelos y abanicos de seda, el dinero, las joyas anillos collares etc etc y toda cosa de valor que encontraron.
Después se acercaron a la barra y les pidieron el dinero, pusieron todo en unas bolsas de lona negra y se dieron vuelta rumbo a la puerta.
Y en ese instante Jerry Thomas les dijo, Señores esto es un bar, no se van a ir sin tomar algo.¿no?
Los villanos se miraron , asintieron con la cabeza.
Y vieron como jerry ponia licores de varios sabores en sus coctelera y los batía.
Y luego los sirvió en tres vasos pequeñito, se llaman vasos de shot no le sobró ni una gota.
Los villanos se miraron y dijeron Chin- Chin, que en inglés se dice Cheers!! (pronúnciese chiiirs). Y bebieron gluc gluc gluc.
Luego dejaron los vaso vacíos en la barra, tac tac tac, se dieron vuelta y caminaron, un paso, dos pasos tres pasos y Pum se cayeron al piso desmayados.(¿borrachos quizás?)
Entonces Jerry mando a su ayudante que era un chico chino a buscar al Sherif (la policía), y cuando el sheriff llego " taca tac taca tac" montado en su caballo blanco junto a su equipo, esposó a los villanos y sus ayudantes los llevaron a la cárcel.
Después de esto el pianista volvió a tocar - tara rara taran taran - y todos fueron felices.
El sheriff le devolvió el dinero y los objetos robados a sus dueños:
Joyas, relojes, pañuelos y abanicos de seda, sombreros.
Y mientras todos brindaban felices, comentaron una cosa, ese día el Jerry Thomas había sido un héroe.

Y colorín colorado este cuento se a terminado.

"Nadie sabe que tenia el cóctel, nadie sabe si esto sea leyenda o verdad, pero a mi me gustaría creer que mi oficio tiene un poco de ser héroe.

May the cocktail be with you.

1 comentario:

Unknown dijo...

Simplemente me saco el sombrero ante tu manera de contar la historia!