El otro lado de la Barra

Revista Bacanal Noviembre 2007

Salio una nota sobre mi barra en la revista Bacanal del mes Noviembre en una sección llamada Hora Vermú el periodista es Claudio Weisffeld aquí la transcribo.

FoddBar788- Dicen que la primera impresión es la que cuenta, pero también dicen que la excepción hace a la regla.
Pues entonces, 788 sería la excepción. A primera vista, ni por fuera, ni por dentro, el bar parece un lugar apropiado para beber martinis y single malts. Lo primero que se ve al entrar es un ambiente bastante iluminado y una barra pequeña, con apenas 4 estantes de botellas contra la pared.
Todo cambia cuando uno nota que los nombres impresos sobre las botellas son Grey Goose, Belvedere, Plymouth o chivas Regal, y que además, hay unas cuantas garrafas más que se guardan debajo de la barra. El resultado final es una oferta variada y de alta calidad. Subiendo las escaleras, sorprenden 3 habitaciones que hacen las veces de lounge con puff y almohadones, permintiendo que uno se adueñe de un pequeño living. Además, al fondo hay un patio y un salón para fumadores.
¿Entonces, esto no es un típico cafecito de barrio norte? NO, no lo es. Caso extraño la de este autodenominado foodbar, que con su nombre no busca emular a su casi homónimo 878, de la calle Thames.
En al barra, uno de los puntos fuertes del lugar, está Cuco, versátil bartender. Para entender su pasión por el cocktail vale la pena pedirle que se arremangue el brazo izquierdo y nos deje ver la copa de martini tatuada en su hombro, indicio de lo que puede hacer con la coctelera. Ej: la ceremonia de preparación del Gin Toníc, que en cualquier otro bar es una cubata fácil, de dos ingredientes mas hielo. Aquí, en cambio cuco utiliza un limón por gin tónic, dos rodajas para “pintar” el vaso por dentro, el resto para exprimir en el trago y tres tiras de cáscara para decorarlo. El gin es Bombay. El precio, apenas $12.
Precios. Ese es el otro pilar. La pizarra ubicada detrás de la barra atrae como un imán la mirada de los visitantes. En escasos lugares se consiguen, entre las 18.30 y las 23, 2 cubalibres por $15, dos tragos con absolut a $20, o dos Amarula on the rocks a $15. Manhattan $18, Dry Martini $15. La carta solo muestra cócteles clásicos, aunque hay vodkas y sirups infusionados como para pedir el trago que a uno se le ocurra. Existe un lista de autor escrita de manera imborrable en la cabeza de cuco. La barra es chica y se puede tornar incomoda si el lugar esta lleno, pero durante la semana, en horarios de alter office, si uno tiene ganas de conversar sobre bebidas, o sobre lo que sea, sentarse allí es ideal. Para picar la variedad es grande y tradicional, y hay una buena carta de sándwiches. Menús ejecutivos la mediodía y cocina a la carta por la noche.
Cuestión de números. 788 no tiene el glamour de 647, ni el encanto romántico de 878. Pero se sostiene con tres pilares que conforman su columna vertebral: Buenos precios, un barman sabio y una ubicación donde no abundan alternativas similares. En definitiva, una opción inteligente para beber un trago bien hecho mientras la ciudad oscurece.

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Bueno Amigos Felices fiestas y por favor pasen por

el BLOG http://ibizabartenders.blogspot.com/

Es de un gran BArman De IBIZA y no tien despedicio

May the cocktail be with you amiguitos